GLA un coche de lo más atractivo
Aunque el coche de producción ha perdido algo respecto al
prototipo que se exhibió en diversos salones, el GLA es un coche muy atractivo.
Como casi todos los Mercedes más recientes.
Sus cuatro plazas acogen bien a otros tantos adultos que, de
todas formas, deberán estar atentos a su cabeza a la hora de entrar y salir del
coche porque, pese a ser un todocamino, es bajo, algo que debería compensarse
en ahorro de combustible.
El interior está bien presentado aunque se podría pedir algo
más de alegría. Es demasiado simple, por no denominarlo soso. El maletero tiene
un buen tamaño.
Se sitúa entre los más grandes, superando en casi 80 litros al
de la berlina Clase A. El equipamiento, en esta versión al menos, es completo.
Adecuado al precio del coche, que no es barato precisamente.
El motor diésel de 170 caballos se muestra razonablemente
silencioso aunque alguna vibración se aprecia en el interior, particularmente
cuando el coche está parado. En marcha, a partir de ciertas velocidades, los
retrovisores laterales producen un bufido aerodinámico.
La unidad probada era 4Matic, lo que supone que tienen tracción
total. La caja de cambios es automática de doble embrague, de siete marchas.
Resulta brusca en las dos marchas más cortas, pero suave y muy eficiente en las
demás. Descontando la brusquedad inicial, este conjunto de cambio y motor es el
motivo de que el coches resulta muy agradable de conducir: dirección suave de
tacto pero que no impide un perfecto control del coche, frenos muy eficaces y
excelente respuesta del acelerador.
Por cierto que las versiones 4Matic tienen un botón que
modifica la respuesta del pedal del acelerador, la caja de cambios automática,
la sensibilidad del ABS e incluso la eficacia de iluminación de los faros
adaptativos (si los lleva). Hay otro botón en la consola que acciona el control
de velocidad de descensos por medio de los frenos.
Por el momento, no se comercializa todavía la suspensión off
road que eleva tres centímetros la altura del coche, por lo que este se
encuentra un poco limitado en pistas en mal estado.
En cambio, ese poco más de
recorrido de suspensión y los neumáticos de un perfil más alto, lo hacen más
confortable que el Clase A y no se aprecian, en conducción normal o incluso
rápida, diferencias de comportamiento.
Tanto es así que por una diferencia de
unos 2.000 euros, parece una alternativa más recomendable que la del Clase A
220 D. Junto con esas prestaciones prácticamente iguales dispondrán de más
confort, más amplitud, una silueta más a la moda y la seguridad de la tracción
total.
Comentarios
Publicar un comentario